Luis Fuentes Troncoso
Desde niño tuve la inquietud por los trabajos en cuero. Mi abuelo era herrero y solía pasar horas armando y desarmando monturas. En la adolescencia hice sandalias y carteras como un pasatiempo que me permitió mantener contacto con los artesanos, visitar ferias y compartir conocimientos y aprendiendo de ellos. Actualmente me dedico por completo a mi oficio. Mis piezas se hacen a pedido, ya sean los trabajos repujados en sueleta y los contenedores lumínicos en pergamino de cuero de chivo